La crisis humanitaria en Gaza ha llevado a la muerte de más de 50 niños por desnutrición desde el inicio del bloqueo de ayuda el 2 de marzo. La guerra, que ya ha causado más de 58.000 muertes y 100.000 heridos, ha exacerbado la situación alimentaria, con informes de casi 900 muertes relacionadas con la búsqueda desesperada de comida. La UNRWA ha examinado a más de 242.000 niños, revelando que uno de cada diez está desnutrido. La escasez de suministros médicos y alimentos se agrava por un estricto bloqueo israelí, lo que impide la entrada de ayuda humanitaria esencial. Las organizaciones internacionales claman por una intervención urgente para evitar más muertes infantiles en esta crisis totalmente prevenible.
La situación en Gaza se ha vuelto crítica, con más de 58,000 muertos y 100,000 heridos desde el inicio del conflicto hace 21 meses. La guerra ha intensificado los ataques israelíes y ha provocado un alarmante aumento en las muertes infantiles por desnutrición.
En las últimas semanas, las agencias de la ONU han documentado casi 900 muertes entre los habitantes de Gaza, muchos de ellos mientras intentaban acceder a alimentos a través de centros de ayuda gestionados por la Fundación Humanitaria de Gaza. Este contexto sombrío ha llevado a Juliette Touma, directora de Comunicación de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), a reflexionar sobre las tragedias que ha presenciado en su labor humanitaria.
Touma recuerda a Adam, un niño que conoció en Yemen durante un asedio. Con solo diez años y un peso inferior a lo normal, Adam no podía comunicarse ni llorar; su único sonido era el esfuerzo para respirar. Lamentablemente, murió poco después debido a la desnutrición.
Años antes, otra colega, Hanaa, le contó entre lágrimas sobre Ali, un adolescente sirio que también sucumbió a la desnutrición en medio del conflicto. “Que un chico de 16 años muera de desnutrición dice mucho”, reflexionó un epidemiólogo tras conocer la noticia. Estas historias han dejado una huella imborrable en quienes trabajan en situaciones extremas como estas.
A medida que la guerra continúa, la realidad en Gaza se torna cada vez más angustiante. En 2022, cuando Touma visitaba escuelas donde los niños mostraban alegría y salud, ya se sentía el impacto del bloqueo que llevaba más de quince años afectando a la región. Sin embargo, había acceso a alimentos gracias a importaciones y producción local.
Pese a ello, las imágenes de niños como Adam y Ali resurgen con fuerza ante el incremento alarmante de casos de desnutrición. Las tasas están aumentando rápidamente y afectan gravemente a los menores en Gaza.
Las cifras son desgarradoras: más de 50 niños han muerto por desnutrición desde el inicio del asedio el 2 de marzo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) reporta que uno de cada diez niños examinados por la UNRWA está desnutrido. Ahlam, una bebé desplazada constantemente desde que comenzó el conflicto, es uno de estos casos críticos.
Ahlam enfrenta una grave desnutrición debido al trauma y las condiciones inhumanas que vive su familia. Su supervivencia está en duda; sin embargo, hay esperanzas si se logra proporcionar asistencia adecuada.
A pesar del esfuerzo humanitario, hay escasez crítica de suministros terapéuticos para tratar a los niños afectados por desnutrición. El estricto bloqueo impuesto por Israel limita severamente la entrada de alimentos y medicamentos esenciales.
Aunque existen momentos en los cuales el bloqueo se suaviza, desde el 2 de marzo la UNRWA no ha podido enviar ayuda humanitaria necesaria para aliviar esta crisis creciente. Recientemente, Salam, otra bebé desnutrida que llegó tarde a recibir atención médica en una clínica UNRWA falleció antes de ser atendida.
La pregunta persiste: ¿cuántos bebés deben morir antes de que se tomen medidas efectivas? En este siglo XXI es inaceptable que existan muertes prevenibles por desnutrición. Actualmente hay más de 6000 camiones con suministros humanitarios esperando ingresar a Gaza, lo cual podría marcar una diferencia significativa para miles de familias vulnerables.
Es crucial actuar ahora para evitar más tragedias como las vividas por Ahlam y Salam. La comunidad internacional debe cuestionar cuánto tiempo más se permitirá que continúen estos horrores sin respuesta efectiva ante una crisis humanitaria tan devastadora.
Cifra | Descripción |
---|---|
50+ | Número de niños que han muerto de desnutrición desde el 2 de marzo. |
58,000 | Número total de muertos en Gaza durante la guerra. |
100,000 | Número total de heridos en Gaza durante la guerra. |
242,000 | Número de niños examinados por la UNRWA en Gaza. |
1 de cada 10 | Proporción de niños examinados que están desnutridos. |
Más de 50 niños han muerto de desnutrición desde que comenzó el bloqueo de la ayuda en Gaza el pasado 2 de marzo.
La guerra en Gaza, que lleva 21 meses, ha causado un gran número de muertes y heridos, además de un incremento en las tasas de desnutrición infantil debido a la escasez de alimentos y medicinas provocada por el bloqueo.
La UNRWA ha examinado a más de 242.000 niños menores de cinco años en Gaza y tiene camiones con alimentos y suministros esperando para entrar, pero no ha podido llevar ayuda humanitaria desde el 2 de marzo.
Hay muy pocos suministros terapéuticos para tratar a los niños con desnutrición debido al estricto bloqueo impuesto por las autoridades israelíes, lo que impide la entrada de alimentos, medicamentos y otros productos esenciales.
Los constantes desplazamientos forzados, la falta de agua potable y la escasez de alimentos han debilitado gravemente el sistema inmunológico y la salud general de muchos bebés y niños pequeños en Gaza.
Es crucial tomar medidas inmediatas para evitar más muertes infantiles por desnutrición, ya que estas son totalmente prevenibles. La comunidad internacional debe actuar para permitir la entrada de ayuda humanitaria urgente.