Christian Nègre, un alto cargo del Ministerio de Cultura de Francia, ha sido acusado de drogar a más de 250 mujeres durante entrevistas de trabajo. Las víctimas denunciaron que Nègre les ofrecía bebidas mezcladas con potentes diuréticos ilegales, provocando en ellas una necesidad urgente de orinar y malestar físico. Este escándalo ha salido a la luz tras denuncias previas en 2018 sobre su comportamiento inapropiado, incluyendo intentos de fotografiar a funcionarias. Aunque fue destituido y enfrentó investigaciones penales, continuó trabajando en el sector privado. Este caso resalta el problema del abuso por drogas en Francia, conocido como "sumisión química".
Un escándalo ha sacudido al Ministerio de Cultura de Francia, donde se han presentado denuncias por parte de casi 250 mujeres que afirman haber sido drogadas con sustancias ilegales durante entrevistas de trabajo realizadas por Christian Nègre, un alto cargo de recursos humanos que ha sido destituido y actualmente enfrenta una investigación penal.
Una de las víctimas, Sylvie Delezenne, relató su experiencia a 'The Guardian'. En 2015, la especialista en marketing fue contactada por Nègre a través de LinkedIn para realizar una entrevista laboral. Delezenne había soñado con trabajar en el Ministerio de Cultura, pero tras esta experiencia no logró obtener el empleo y ahora se suma a las más de 250 mujeres afectadas.
El método empleado por Nègre era alarmantemente sencillo. Inicialmente, contactaba a las mujeres bajo el pretexto de participar en procesos de selección. Luego, las recibía en París y les ofrecía un café o un té, bebidas que contenían potentes diuréticos prohibidos. Esta mezcla provocaba en las víctimas una necesidad urgente de orinar, acompañada de síntomas como temblores, sudoración y malestar físico.
A medida que avanzaban las entrevistas, Nègre sugería continuar la conversación al aire libre, alejándose de cualquier baño disponible. Varias denunciantes relataron sentirse abrumadas por la creciente necesidad de orinar. Una mujer describió cómo experimentó temblores y sudoración extrema mientras intentaba pedir una pausa, pero Nègre continuó caminando sin detenerse.
Otra víctima compartió que cuando solicitó regresar debido a su urgencia, él optó por ir en dirección opuesta. En un momento desconcertante, le preguntó si "necesitaba hacer pipí", lo que resultó en episodios de humillación pública y una profunda sensación de vergüenza que ha marcado sus vidas.
Las primeras alertas sobre el comportamiento inapropiado de Nègre surgieron en 2018, cuando fue denunciado por un compañero tras intentar fotografiar a una funcionaria. Durante la investigación policial subsiguiente, se hallaron documentos donde Nègre registraba dosis administradas y reacciones de las mujeres bajo el título "Experimentos".
A pesar de ser expulsado del Ministerio en 2019 y enfrentar cargos relacionados con la administración de sustancias estupefacientes y violencia sexual, Nègre continuó trabajando en el sector privado mientras el proceso legal estaba pendiente.
A seis años del comienzo del caso, este incidente resalta un problema persistente en Francia: el abuso mediante drogas, conocido como "sumisión química". Este término ganó notoriedad recientemente cuando Gisèle Pelicot rompió su anonimato durante un juicio contra varios hombres condenados por violación.
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| Cifra | Descripción |
|---|---|
| 250 | Número de mujeres afectadas |
| 2018 | Año en que se dio el primer indicio del caso |
| 2019 | Año en que fue expulsado del Ministerio |
| 6 años | Duración del proceso penal hasta la fecha actual (2025) |
Christian Nègre es un alto cargo del Ministerio de Cultura de Francia, responsable de recursos humanos, que ha sido acusado de drogar a más de 250 mujeres durante entrevistas de trabajo.
Nègre utilizaba potentes diuréticos ilegales en las bebidas que ofrecía a las mujeres, lo que provocaba en ellas una necesidad urgente de orinar y otros síntomas físicos como temblores y sudoración.
Nègre contactaba a las mujeres para supuestos procesos de selección y les ofrecía café o té en las entrevistas. Luego, las llevaba a pasear lejos de los baños mientras ellas sufrían los efectos de la droga.
Las víctimas han experimentado episodios de humillación pública y vergüenza, lo que ha afectado negativamente sus vidas personales y profesionales.
Las primeras denuncias surgieron en 2018, cuando un compañero lo acusó de intentar fotografiar a una funcionaria. Desde entonces, se han acumulado numerosas denuncias por su comportamiento abusivo.
La "sumisión química" se refiere al abuso mediante el uso de drogas para incapacitar a una persona con el fin de cometer actos sexuales no consentidos. Este término ha cobrado relevancia en Francia debido a varios casos recientes.