Las altas temperaturas han causado la muerte de 114 personas mayores de 65 años en el verano de 2025, según datos del Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo). El calor extremo representa un grave riesgo para la salud, especialmente para los ancianos, quienes enfrentan dificultades en la regulación de su temperatura corporal y pueden no percibir adecuadamente la sed. Para mitigar estos riesgos, el Gobierno de España ha implementado el Plan Nacional de Actuaciones Preventivas contra los Efectos del Exceso de Temperatura sobre la Salud. Se recomienda mantener una adecuada hidratación, permanecer en ambientes frescos y evitar la exposición directa al sol durante las horas más calurosas.
Las altas temperaturas se han convertido en un grave riesgo para la salud, especialmente entre las personas mayores. De acuerdo con los datos del portal MoMo (Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria), durante el verano de 2025 se han registrado 114 fallecimientos de personas mayores de 65 años atribuidos a las elevadas temperaturas.
Con el fin de mitigar los riesgos para la salud, particularmente entre los grupos más vulnerables, el Gobierno de España ha puesto en marcha el Plan Nacional de Actuaciones Preventivas de los Efectos del Exceso de Temperatura sobre la Salud 2025.
Una ola de calor se caracteriza por un periodo prolongado con temperaturas anormalmente altas para la época del año, especialmente cuando no hay descenso nocturno. Estas condiciones pueden tener efectos severos sobre la salud, siendo las personas mayores las más afectadas.
Causas de la vulnerabilidad en personas mayores
Durante una ola de calor, el organismo puede sufrir un estado de estrés térmico, donde no logra mantener su temperatura interna dentro de límites seguros. Esta situación puede resultar en consecuencias graves como golpes de calor, síncopes, deshidratación severa e insuficiencia renal, e incluso provocar la muerte si no se toman medidas preventivas adecuadas a tiempo.
Es crucial estar alerta ante síntomas como:
En caso de presentar estos síntomas, se debe buscar atención médica inmediata.
A pesar del riesgo significativo que representa el calor extremo para la salud pública, especialmente entre los grupos más vulnerables, es posible minimizar sus efectos mediante la adopción adecuada de medidas preventivas.
Cifra | Descripción |
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114 | Fallecimientos de personas mayores de 65 años atribuidos a altas temperaturas en el verano de 2025. |
65 | Edad mínima de las personas fallecidas (mayores de 65 años). |
11:00 - 18:00 | Horas recomendadas para restringir la exposición al exterior durante el calor extremo. |
1-2 | Horas recomendadas para ingerir agua, incluso sin sensación de sed. |
Una ola de calor se define como un periodo prolongado con temperaturas anormalmente altas para la época del año, especialmente cuando no descienden durante la noche. Estas condiciones pueden provocar efectos graves sobre la salud, particularmente en personas mayores.
Las personas mayores son más vulnerables al calor extremo debido a varios factores, incluyendo la pérdida de la capacidad de termorregulación, menor percepción de la sed, uso de medicamentos que aumentan el riesgo de deshidratación, condiciones de salud preexistentes y condiciones habitacionales inadecuadas.
Es importante estar atentos a signos como mareos o debilidad, dolor de cabeza, confusión o desorientación, sudor excesivo o piel seca, y pulso acelerado. En presencia de estos síntomas, se recomienda buscar atención médica inmediata.
Se aconseja mantener una hidratación adecuada, permanecer en ambientes frescos, utilizar vestimenta ligera y adecuada, elegir una alimentación refrescante y restringir la exposición al exterior durante las horas de mayor calor.