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Adelgaza comiendo de todo
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Adelgaza comiendo de todo

Por Elsa Bernaldo de Quirós
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infoestiloysaludes/4/4/17
jueves 22 de enero de 2015, 17:25h

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Una dieta sana es comer de todo, cinco veces al día, sin privarte de lo que te gusta pero tomándolo con moderación.

Cuando se comienza una dieta nos entran las prisas por perder peso rapidamente, eliminamos alimentos, nos saltamos la cena... Para que un plan dietético funcione hay que comer bien. Todo es bueno hasta los alimentos "prohibidos": pan, pasta, quesos..., si se toman con moderación. El secreto está en tus gustos a tu dieta y seguir estos trucos para poder comer de todo, pero en su justa medida.

Haz 3 comidas principales (desayuno, comida y cena) y dos tentempiés. Investigaciones han demostrado que hacer cinco comidas al día reduce el sobrepeso. No comes más aunque te lo parezca, porque el apetito que tendrás si tomas algo cada tres horas no es el mismo que si llegas con un hambre voraz a comer. La merienda es muy importante y es la que solemos saltarnos más a menudo. Un pequeño bocadillo integral y un zumo natural o un lácteo desnatado son buenas opciones.

¿Alimentos prohibidos?

Hay alimentos prohibidos que al comenzar una dieta es lo primero que retiramos como el azúcar, chocolate... Hay que comer de todo aunque a veces es necesario conocer algunos trucos para no privarnos de nada.

Las pizzas precocinadas tienen muchas calorias pero si las hacemos nosotros en casa no nos saltaremos la dieta. Cambia los condimentos, los embutidos por vegetales, ponle poquito queso y a ser posible descremedo. Con estos consejos podrás disfrutar de una pizza con menos calorías.

Los dulces... qué difícil es dejarlos a un lado. Reservate para después de la comida. Un pastel ligero de chocolate tiene tan solo 100 cal.

Y es que si lo tuyo es el chocolate (no más de 20 g al día), tiene que ser negro, con un mínimo de 70% de cacao porque contiene menos azúcares. Tómalo mejor por la mañana, ya que el metabolismo está más activo y es el mejor momento para comer una onza de chocolate.

Las patatas fritas tienen muchas calorías, aunque no te recomendamos que prescindas de ellas. Una opción es, en vez de freir las patatas, mételas en el microondas para cocerlas. Puedes hacer muchos platos con las patatas cocidas, por ejemplo, una deliciosa tortita.

Las legumbres, en general, tienen hidrátos de carbono de índice glucémico medio o bajo que permiten controlar el peso. Lo ideal es consumir legumbres al menos dos veces a la semana.

La pasta sí, pero condimentada de forma ligera. Olvídate de las rellenas y de salsas con quesos o nata como la carbonara. Elige una sin apenas calorías con tomate natural o seco y albahaca fresca. Y añade solo una cucharada de queso rallado.

Entre horas...

Prepárate a media tarde o a media mañana un minibocadillo integral con un relleno ligero como pechuga de pollo y lechuga, atún al natural con pimientos o jamón ibérico.

Los frutos secos (no fritos) poseen un gran contenido en vitamina E. Si te apetece algo entre horas, un puñado de cacahuetes es el alimento idóneo para calmar el apetito.

Antes de dormir

Cenar tarde y en exceso te llevará a ganar peso, pero saltarte la cena o picar también te impedirán descansar bien. Haz una cena ligera pero completa, con un primero (caldo, puré o verduras) y un segundo, una tortilla francesa o pescado, por ejemplo.

Desmontando mitos

No te quites el azúcar. Tomar dos cucharaditas al día se considera adecuado en una alimentación sana. Si te gusta mucho el dulce, puedes sustituir el azúcar por canela, que no añade casi calorías y te ayuda a quemarlas, o edulcorantes naturales como el dulce de agave.

Complementar las comidas con cualquier tipo de salsa aumenta considerablemente las calorias. ¡Decántate por vinagretas o salsas ligeras!

Bebe como mínimo cinco vasos de agua al día, así, sin más, el agua no adelgaza, pero puede influir y mucho en el peso, ya que a veces la sed se confunde con hambre. Sigue la regla del 3 + 2: toma tres vasos de agua por la mañana y dos por la tarde. Beber agua en abundancia es la forma más eficaz de depurar el cuerpo y mantenerlo perfectamente hidratado.

¿Que no sabes qué más tomar entre horas? Los zumos son un tentempié ligero y muy saciante.

Hay infusiones que depuran y adelgazan como el diente de león, que tiene un poderoso efecto diurético y ayuda a eliminar toxinas. Además de tomarla como infusión, puedes añadir las hojas frescas de la planta a las ensaladas. También es interesante el ortosifón, aporta gran cantidad de flavonoides que estimulan la eliminación de la grasa acumulada. El té o infusión. Son las bebidas perfecta para cuando se quiere adelgazar. El té o las infusiones contienen una hormona que activa el metabolismo y acelera la combustión de las grasas.

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