www.estiloysalud.es
El ejercicio moderado mejora la memoria a través de la microbiota, según un estudio del CSIC
Ampliar

El ejercicio moderado mejora la memoria a través de la microbiota, según un estudio del CSIC

lunes 18 de agosto de 2025, 18:42h

Escucha la noticia

Un estudio del Centro de Neurociencias Cajal (CNC) del CSIC revela que el ejercicio físico moderado mejora la memoria y la neurogénesis, mediado por cambios en la microbiota intestinal. Los investigadores descubrieron que una práctica de 40 minutos a intensidad media incrementa la diversidad bacteriana en el intestino, lo que a su vez potencia los efectos cognitivos del ejercicio. Este hallazgo sugiere que personalizar el ejercicio según las características individuales podría maximizar sus beneficios para la salud cerebral. Además, abre nuevas posibilidades para terapias basadas en la microbiota en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas y trastornos cognitivos.

Un reciente estudio del Centro de Neurociencias Cajal (CNC) del CSIC, vinculado al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, ha puesto de manifiesto la relación entre el ejercicio físico moderado y la microbiota intestinal en los efectos cognitivos que este tipo de actividad puede generar. Los investigadores, a través de modelos animales, han determinado que una práctica física de aproximadamente 40 minutos a velocidad media no solo mejora la diversidad bacteriana en el intestino, sino que también influye significativamente en funciones cerebrales como la memoria y la neurogénesis.

Los hallazgos, publicados en eBioMedicine, revista del grupo The Lancet, sugieren nuevas posibilidades para el desarrollo de terapias centradas en la microbiota que podrían ayudar a combatir enfermedades neurodegenerativas y trastornos cognitivos. A pesar de que ya se conocían los beneficios del ejercicio sobre el cerebro, como su capacidad para contrarrestar el envejecimiento o mejorar condiciones como el Alzheimer, este estudio revela un aspecto crucial: la hormesis.

La importancia de la intensidad del ejercicio

El concepto de hormesis se refiere a cómo los efectos positivos del ejercicio pueden depender de una dosis adecuada; es decir, hay un punto óptimo tras el cual aumentar la intensidad o duración podría resultar contraproducente. Este fenómeno varía entre individuos, lo que lleva a los científicos a investigar cuál es esa intensidad ideal que maximiza los beneficios cognitivos sin caer en excesos perjudiciales.

Bajo la dirección de José Luis Trejo, el estudio ha demostrado que el ejercicio moderado mejora no solo el rendimiento cognitivo y la discriminación espacial, sino también la generación de nuevas neuronas en el hipocampo, una región fundamental para procesos como la memoria y el aprendizaje. Según Elisa Cintado, primera autora del estudio, “hay un punto óptimo de ejercicio desde el cual se logran beneficios”, advirtiendo que excederse puede anular estas mejoras.

Microbiota: un factor clave

Además de identificar las condiciones ideales para potenciar la función cognitiva y la neurogénesis, los investigadores encontraron que estos beneficios están mediadores por cambios en la composición de la microbiota intestinal. Para ello, diseñaron diferentes protocolos de ejercicio —moderado, prolongado y de alta intensidad— analizando sus repercusiones sobre la memoria y las características microbianas en ratones.

Trejo destacó que aunque ya se sabía que hacer ejercicio regularmente beneficia al cerebro, “desconocíamos el papel específico de la microbiota intestinal en este proceso”. La investigación reveló que esta microbiota cambia según el estilo de vida y que el ejercicio moderado incrementa tanto la diversidad bacteriana como ciertos géneros bacterianos específicos relacionados con un mejor rendimiento cognitivo.

Evidencias causales mediante trasplantes fecales

Para comprobar si los cambios observados en la microbiota eran causales respecto a los efectos del ejercicio, los investigadores realizaron trasplantes fecales. Al transferir muestras fecales de ratones activos a aquellos sedentarios, se evidenció que estos últimos mejoraron su memoria y aumentaron su neurogénesis cuando recibieron microbiota proveniente de ratones con actividad moderada. En cambio, aquellos que recibieron microbiota asociada a ejercicios prolongados no mostraron mejoras significativas.

Este descubrimiento subraya cómo “los efectos cognitivos del ejercicio pueden ser mediados por la microbiota intestinal”, según Cintado. Además, se observó que los animales ejercitados moderadamente presentaban una mejor preservación tanto de la barrera hematoencefálica como del epitelio intestinal frente a aquellos sometidos a regímenes más intensos.

Implicaciones para la salud humana

A pesar de haberse realizado en modelos animales, los resultados poseen importantes implicaciones para la salud humana. Los autores sugieren que los beneficios del ejercicio sobre el cerebro dependen profundamente del tipo y duración del mismo. Esto plantea una necesidad urgente: personalizar las rutinas físicas según las características individuales podría maximizar sus efectos positivos.

Cintado concluyó señalando: “Deberíamos replantearnos la idea que más ejercicio no siempre es mejor”. Una práctica moderada y adaptada puede ser más eficaz tanto para el cuerpo como para el cerebro. Esta investigación abre nuevas avenidas para desarrollar terapias basadas en microbiota, ofreciendo un campo prometedor dentro de la neurobiología con potenciales aplicaciones en enfermedades neurodegenerativas y trastornos cognitivos.

El estudio fue financiado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades e incluyó colaboración con investigadores del APC Microbiome Ireland (University College Cork) y del Amsterdam University Medical Center (UMC).

Preguntas sobre la noticia

¿Cuál es el enfoque principal del estudio del CSIC sobre la microbiota y el ejercicio físico?

El estudio investiga cómo el ejercicio físico moderado y la microbiota intestinal influyen en los efectos cognitivos asociados al deporte, mostrando que una práctica física adecuada mejora la diversidad bacteriana en el intestino y modula los efectos positivos en el cerebro.

¿Qué tipo de ejercicio se considera óptimo según el estudio?

El estudio sugiere que el ejercicio moderado, con una duración de unos 40 minutos a velocidad media, es el más beneficioso para mejorar la memoria y la neurogénesis.

¿Cómo afecta la microbiota intestinal a los efectos del ejercicio en el cerebro?

Los cambios en la composición de la microbiota intestinal son mediadores clave de los beneficios cognitivos del ejercicio, ya que ciertas bacterias pueden contribuir a mejorar la memoria y el desarrollo neuronal.

¿Qué implicaciones tiene este estudio para la salud humana?

Aunque realizado en modelos animales, los hallazgos sugieren que personalizar el ejercicio físico según las características individuales podría maximizar sus beneficios para el cerebro y el cuerpo.

¿Qué se puede concluir sobre la relación entre intensidad del ejercicio y sus efectos?

El estudio destaca que un exceso en la intensidad o duración del ejercicio puede ser contraproducente, indicando que hay un punto óptimo de ejercicio para obtener beneficios cognitivos.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios